VISIÓN DEL ARTISTA Y DEL MÚSICO ROMÁNTICO
Beethoven fue el primero en desatarse de las ligaduras del clasicismo en la música, expresando a los demás el mundo interno del compositor, de modo que entrara en juego la subjetividad de la interpretación, todo esto a partir de su tercera sinfonía Eroica
En la época del auge de la revolución francesa, el músico se crea como artista, creando paralelamente un mundo poético para sí, en donde la creatividad puede jugar y desarrollarse en los límites de la racionalidad o irracionalidad.
Un perfecto ejemplo y representante del músico romántico no es nada menos que "el violinista del diablo" Niccolò Paganini, un dominador completo de la técnica, un virtuoso del violín que además expresa el ser a través de su música.